Nuevas canciones inéditas de Cri Cri, El Grillito Cantor
Nuevas canciones inéditas de Cri Cri, «El Grillito Cantor», a través de múltiples plataformas digitales.
Francisco Gabilondo Soler, nuestro querido Cri Cri, «El Grillito Cantor», dejó un acervo conocido de 263 composiciones llenas de vida, magia y encanto. Francisco supo valorar y describir la diversidad de los seres humanos en la vida cotidiana en su contexto cultural y en su época; su curiosidad lo llevó a dibujar con palabras y melodías los oficios y profesiones; imaginó más de 400 personajes que se retratan en sus canciones y narraciones; seres humanos de diferentes nacionalidades y personalidades, con todo tipo de actitudes ante la vida. Él mismo fue: corredor, nadador, boxeador, torero, navegante, músico, narrador, y además, astrónomo.
Gracias a Roario Patiño Domínguez, esposa y representante artística y personal de Francisco Gabilondo Soler durante toda su vida, y al archivo histórico, que resguarda con orgullo la Fundación Francisco Gabilondo Soler, Cri Cri, presentamos una selección de sus grandes éxitos digitalizadas directamente de las cintas originales de los programas de radio en vivo, transmitidos por la legendaria XEW.
En la época en que la radio era imprescindible en las vidas de las familias, sin importar edad y condición, pues por la radio se enteraban de los acontecimientos en el mundo, y con programas como el de Francisco Gabilondo Soler, las familias se reunían para disfrutar juntos de un momento de solaz esparcimiento, que más tarde recordaría con amable evocación, llevándolos en su mente y corazón para, a su vez, compartirlo con sus nietos y las nuevas generaciones.
La originalidad y el valor innegable de esta colección de piezas, es que fueron grabadas en vivo, por lo que captan el preciso momento de la ejecución, que en ese instante llegaban a todos los hogares. Piezas ejecutadas por músicos excepcionales con una capacidad fuera de serie para improvisar, comenzando por don Francisco Gabilondo, quien enriqueció sus propias canciones con aportaciones melódicas o adornos rítmicos que hicieron únicas e irrepetibles cada una de las piezas de la colección.
A continuación, presentamos una colección de 9 álbumes con los más grandes éxitos de Francisco Gabilondo Soler Cri Cri. Canciones sobresalientes de la colección Francisco Gabilondo Soler en vivo, su historia dentro de la radio.
Cochinitos dormilones, del álbum «Cantando se entiende la gente»
La narración a cargo de Manuel Bernal que escuchamos en este álbum resulta muy divertida y entretenida, permitiendo saber que el tema de la moda siempre está presente y el cuidado de los pequeños también. La versión en vivo fue grabada en 1959.
En cuanto a la música, precisamos que la composición data de 1935. Es un Vals a ritmo de los sueños y que pudo ser una canción de cuna preparada para Diana y Jorge Gabilondo Patiño, hijos de Francisco Gabilondo y Rosario Patiño, los primeros niños que además de escuchar las canciones del Grillito Cantor, también fueron los primeros en soñar con estas piezas y queda demostrado en las cartas que escribió Pancho Gabilondo a su esposa y que al reverso de las misivas se encuentran plasmados dibujos hechos por Jorge y Diana, imágenes de los personajes creados por Pancho Gabilondo para diferentes canciones.
Los cochinitos dormilones ya son conocidos por muchas personas gracias a esta canción donde nos narra las aventuras e inquietudes que todas las niñas y niños pueden tener. La ejecución en vivo es muy bonita e interesante pues nos permite una vez más escuchar a Francisco Gabilondo Soler como nunca lo habías escuchado y como jamás lo imaginaste.
Dí por qué, del álbum «El viento que arrulla cantando»
La abuelita de Francisco Gabilondo Soler se llamaba Emilia Fernández Flores y ella le compartió muchos cuentos y canciones, de otra época, pero que recrearon en Panchito un mundo formidable que lo llevó a permanecer en ese universo increíble donde todo es posible. Abuelita Emilia fue gran impulsora en la carrera de Pancho Gabilondo, desde su compañía y paciencia, amor y cariño a su nieto, entregando el tiempo y la dedicación suficiente para que también nosotros, en la actualidad continuamos viajando con Cri Cri a horizontes inimaginables.
En esta canción romántica reconocemos lo que todas las niñas y niños saben hacer: «preguntar» ¿Por qué esto?, ¿por qué aquello?… y así también le ocurrió al pequeño Pancho Gabilondo quién preguntaba a su queridísima abuelita por qué sus cabellos son como la espuma del mar.
La narración que antecede la canción nos ilustra sobre las muchachas antiguas y dulces, que carecer de ellas es lamentable pues nadie como ellas, ya que son poseedoras de paciencia y dulzura, así como fue la abuelita de Pancho Gabilondo. Compuesta en 1939, escuchando una magnífica interpretación del violín de Alfredo Núñez de Borbón.
Chivo ciclista, del álbum «El dicharachero musical»
Aprender a andar en bicicleta no es difícil, solo es cosa de mucha práctica; queda muy bien explicado en esta inigualable creación de Francisco Gabilondo Soler, donde a manera de cuento y de las experiencias de un chivo que aprende a andar en ese artefacto de dos ruedas después de varias caídas, se escucha muy divertido. Pero siempre hay imprevistos que pueden terminar en un accidente…
La interpretación del foxtrot con acentos al dixieland hace de esta versión algo especial y más aún con el formidable trabajo por parte del equipo de músicos que intervienen, pues ellos se permiten hacer de las suyas con diferentes objetos que al hacerlos sonar de manera rítmica y con gran habilidad consiguen atraer a la audiencia de manera inmediata, en un abrir y cerrar de ojos entramos a ritmo.
A cargo de Manuel Bernal, «el declamador de América», podemos escuchar la narración donde nos presenta a Monsieur Tartagal, personaje imaginario que de manera divertida y entretenida conversa con Cri Cri de temas para la salud, incluyendo el árnica para los golpes de nuestro querido chivo ciclista.
El Chorrito, del álbum «Caja de sorpresas musicales»
Una de las más memorables composiciones de Francisco Gabilondo Soler donde nos invita a disfrutar una interpretación musical formidable, y que en sus letras nos explica a ritmo de la mazurca el ciclo del agua y su relación con un chorrito que vive en una fuente. La paseante hormiga con carácter y orgullo pasa cerca y se lleva una sorpresa al verse salpicada por el chorrito que sufre las inclemencias del tiempo, acalorado y de mal humor, su naturaleza le hace salpicar agüita que alcanza a la hormiga que seguramente levantó sus enagüitas.
Pancho Gabilondo vivió en Orizaba y el mismo recuerda que en su propia casa existió una fuente, la cual alcanzaba a mojar a cuantas personas, animales e insectos que pasasen cerca, debido a un problema de fontanería común que afectaba el funcionamiento de dicha fuente. Las hormigas que regularmente frecuentan Orizaba son las arrieras, las cuales cargan hojas para su suministro y según describe Pancho Gabilondo que también son sus paraguas, tal idea adoptando los cuentos y comentarios de su abuelita Emilia Fernández.
Compuesta en 1934, siendo una de las interpretaciones que abrieron su programa el día 15 de octubre, del mismo año de su creación, a las 13:15 hrs. desde la XEW.
El Jicote aguamielero, del álbum «El mundo de mis amigos»
Corrido compuesto en 1948, pieza que nos entrega una identidad social a todos los mexicanos donde un jicote de oficio aguamielero considera que su corazón ha sido arrebatado por la bonita reina de las abejas, pero ella con su fuerte orgullo le niega su amor. El jicote sabe bien que aquí todos somos iguales, que en el amor no hay distinciones y ante ese desprecio regresa de la misma manera, con su orgullo, a su maguey pues a la sombra de las pencas es el rey. Es una canción ingeniosa además de divertida y muy colorida.
La narración a cargo de Manuel Bernal, precisa que el jicote es un ser bueno y trabajador, tan trabajador que a veces olvida bañarse, situación que no le permite verse adecuadamente para enamorar a una bella abeja reina, cualquier mariposa corre al verlo. También invitan al cuento a las tusas, pequeños animalitos dientes que acaban con las monocotiledóneas leguminosas, o sea frijoles. El palabrario de Francisco Gabilondo Soler hace de nuevo gala pues jamás deja de incluir cientificismos y cuanta palabra interesante está presente en sus conversaciones. Regresando a las tusas que son el motivo del descuido físico del jicote aguamielero, ocurre una sugerencia para invitar al grillito cantor y resolver el estado que deteriora al jicote, pero el resultado es diferente…
El ratón vaquero, del álbum «Los musicales malvaviscos de Francisco»
Una divertidísima Polka con alusiones al country compuesta en 1936, creación imperdible donde el ratón con grandes pies, travieso de nacimiento y güerito también, nos lleva a cantar y bailar con gran agasajo, y de una vez… porque no, a practicar el inglés.
En el breve cuento que antecede la canción, la voz de Manuel Bernal nos lleva de un lugar a otro, de comparativos diferentes entre una gran soprano, patos, arte y la partida del grillito cantor, por supuesto que el ratón vaquero también hace una gran aparición.
Fiesta de los Zapatos, del álbum «Aventuras Entre Cuentos y Canciones»
Asistir a una fiesta de zapatos podría ser divertido y peligroso, entre pisotones, botas y zapatillas que saltan de un lado a otro, apreciar los pasos de los bailes, tropezar entre agujetas y otras cosas más, entre tantas cosas que nos invitan a imaginar. Todos los zapatos tienen historias muy interesantes y divertidas, y no por ser viejos dejan de ser queridos. Pobre zapatero, ya no puede trabajar porque a sus zapatos les dio por bailar…
El maestro remendón siempre dice que los zapatos aún no están listos cada vez que vamos a recogerlos a la zapatería, y como no va a ser así pues a él le gusta que estos pasen más tiempo divirtiéndose y también les tiene mucho cariño.
Esta aventura en el mundo de la fantasía compuesta al ritmo del Foxtrot y creada en 1935 es una de las mejores piezas de Pancho Gabilondo en el periodo de mayor producción de su obra. La versión en vivo transmitida desde la capital del radio «XEW» desde la ciudad de México nos muestra una versión fresca e interesante.