El «Festival de rock y ruedas Avándaro» cumplió 50 años

El «Festival de rock y ruedas Avándaro» celebrado el 11 y 12 de septiembre de 1971 en Avándaro, Valle de Bravo; cumplió 50 años.

El «Festival de rock y ruedas Avándaro» celebrado el 11 y 12 de septiembre de 1971 en Avándaro, Valle de Bravo; cumplió 5o años. Ha sido por mucho el evento más significativo en torno al fenómeno del rock en nuestro país. Su calidad de gran acontecimiento dentro de la historia de la música en México es innegable, y en lo que por lo menos al rock corresponde, difícilmente hallaremos un trabajo historiográfico del mismo, que no siga la clasificación referida por Armando Molina; según la cual, el rock en México debe considerarse en dos períodos: antes y después de Avándaro.

Han pasado 50 años desde entonces, y qué mejor que aprovechar este emblemático aniversario para integrar la visión de este equipo de trabajo, a la sinergia que dicho festival sigue provocando.

Por medio de un comunicado, se convocó a músicos de la «Generación Avándaro» para que se sumaran a esta celebración. También se convocó a las nuevas generaciones de músicos de rock, para establecer con ellos un canal de comunicación transgeneracional nunca antes visto. Por último, se coordino la participación de otros estados en este magno evento. Finalmente, se invitó a académicos de diferentes universidades del país, para que compartieran sus reflexiones en torno al fenómeno del rock mexicano en la actualidad.

El festival, lejos de agotarse en la producción de un espectáculo anual, tiene como objetivo establecer vínculos creativos no solamente con las nuevas generaciones de músicos, sino con los Multiforos Culturales y lugares de resistencia como «El Tianguis Cultural del Chopo», así como con las universidades, institutos, centros de investigación, escuelas y facultades del mundo entero, para que los jóvenes y no tan jóvenes, establezcan vínculos estéticos, críticos, sociales, políticos y económicos con esta forma de expresión cultural que fue sistemáticamente silenciada con lujo de violencia durante muchos años en nuestro país. Esto desde nuestra perspectiva, es lo más importante.

Si el objetivo general del «Festival Avándaro 50 Aniversario» es dignificar la cultura del rock mexicano, es menester hacer mucho más que solo las actividades de este 11 y 12 de septiembre. Dignificar al rock mexicano significa organizarnos para que los músicos no mueran en el olvido sin haber tenido derecho al sistema de salud pública. Dignificar al rock mexicano significa organizarnos para pensar la masculinidad nefasta que está ahogando a las mujeres y transformarla en relaciones de equidad en pro de la libertad. Dignificar al rock mexicano significa organizarnos para armar una sociedad de gestión colectiva, e ir por el pago justo de las regalías que por derecho
les corresponden a los músicos, intérpretes y compositores… Ojalá podamos superar por el bien de todos, el corto alcance del acontecimiento que fue Avándaro, y por favor, no nos mal interpreten. No nos referimos a que desechemos esa parte de la historia que nos pertenece a todos, para nada. Tampoco nos referimos a que trabajemos para superar el número de asistentes que se reunió en Valle de Bravo en 1971 o a que las nuevas generaciones superen la calidad de la ejecución de los músicos de aquel entonces, ¡no!… Nos referimos a que trabajemos para superar la idea de que todo en el rock mexicano puede ser explicado a partir de una única grandeza que se hunde en el pasado.

La vida es hoy y la dignificación del rock mexicano está en nuestras manos, tenemos el poder, nos la debemos…